Baxter Dury | ¡Ya salió “The Night Chancers”!

Fashionistas fallidos, voyeurs de Instagram, Romeos relajados, personas que huelen a incertidumbre y que se dejan engañar fácilmente, estimados «Night Chancers»… ¡Baxter te ama!

Bueno, amor no es exactamente la palabra correcta, pero estas criaturas son las que han inspirado la construcción del nuevo álbum del compositor Baxter Dury: Night Chancers. Las voces de 10 personajes rescatadas de lo profundo de la noche en sus horas más oscuras.

Un viaje psicológico por un laberinto.

Mientras que el último álbum de Bury, el aclamado Prince of Tears, fue un confesionario cinematográfico que intentaba mantenerse a flote en los mares del fracaso de sus relaciones amorosas, The Night Chancers encuentra un enfoque más directo en sus canciones. Al dibujar personas y situaciones, primero se sumerge profundamente en la oscuridad para arribar finalmente a un crepúsculo emocional.

“Es arrogante pero realmente vulnerable”.

“Es todo un grito teatral nocturno. Es un registro bastante triste, la mayoría de las canciones están inspiradas en tristezas o incertidumbres. Los personajes son problemáticos. Es arrogante, pero realmente vulnerable”. El álbum contiene piezas muy variadas, temáticas que pasan desde los asuntos emocionantes que se disuelven en una sudorosa desesperación (como en la canción “Night Chancers”) hasta lo sucia que puede resultar la vida real (“Slum Lord”), pasando por acosadores de redes sociales (“I’m Not Your Dog”) y el nuevo día, el optimismo privado del sueño (“Daylight”).

La honestidad filosa del sexto álbum de estudio

Lo que le añade colores vibrantes y líneas definidas a esta crónica de medianoche es la paleta musical más rica y extensa que Baxter Dury ha creado hasta la fecha. Un álbum con sonido de Música Disco, pop italiano, ritmos de hip-hop de los 80 y cuerdas que le da a cada micro relato su propia banda sonora.

Con su corazón, su alma y su vida vertidos en el tejido de estas canciones, hay algo que es obvio para quien lo escuche: “¡Baxter te ama!” (De la misma manera que lo grita en el final de la última canción del álbum, “Say Nothing”). Esa es la verdad.